Se empeñaba en recordar la línea de autobús
que no llegaba a tu casa,
pero no conseguía elegir aquella
que no recordaba alguno de los bancos
donde los besos
no esperaban mañana
comentaba que la poesía
insistía en hablar de tus ojos
y no aprendío a olvidar los milímetros
que dilataba tu pupila, cuando discutías
y sin embargo afirmaba
con más sonrisa
en la voz que en la mirada,
que ya no te echaba de menos...
que no llegaba a tu casa,
pero no conseguía elegir aquella
que no recordaba alguno de los bancos
donde los besos
no esperaban mañana
comentaba que la poesía
insistía en hablar de tus ojos
y no aprendío a olvidar los milímetros
que dilataba tu pupila, cuando discutías
y sin embargo afirmaba
con más sonrisa
en la voz que en la mirada,
que ya no te echaba de menos...